• El largometraje dirigido por Margarida Gil que compite en la Sección Oficial del 23FICLPGC se proyectará esta tarde, a las 18:00 horas, en la sala 6 de Cine Yelmo Las Arenas donde la actriz mantendrá una charla con los asistentes
Las Palmas de Gran Canaria, lunes 22 de abril de 2024. Carolina Campanela cuenta con una larga experiencia en el mundo del teatro desde donde ha dado el salto a la gran pantalla como protagonista de Mãos no fogo (Hands in the Fire) (Portugal, 2024, 109 min.). La película dirigida por Margarida Gil que se estrena en España dentro del apartado de largometrajes de la Sección Oficial del Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria donde la actriz recala para compartir con el público de la cita su experiencia en un rodaje que, según confiesa, ha sido todo «un aprendizaje». Lo hará la tarde de este lunes 22 de abril, a partir de las 18:00 horas en la sala 6 de Cine Yelmo Las Arenas, tras la proyección del film.
La obra que, contará con un segundo pase mañana martes 23 (20:00 horas, sala 7), cuenta la historia de Maria do Mar, una joven estudiante de cine que explora las fincas a lo largo del río Duero con el fin de trabajar sobre su tesis acerca de lo real. Sin embargo, la última mansión que visita esconde mucho más de lo que se ve. Se trata, tal y como explica la actriz, de un espacio en el que se explorarán «los límites del mal» a través de los personajes de ficción que la intérprete pudo conocer más en profundidad durante la grabación a través de la lectura.
Y es que Mãos no fogo es una adaptación libre de la novela de Henry James Otra vuelta de tuerca en la que la protagonista se convierte en un «personaje extranjero» que se incorpora a la trama en el proyecto cinematográfico creado por la directora. «Leí el libro cuando empezó el rodaje y creo que fue una buena decisión porque era como si de repente pudiera ver mejor al resto de personajes, ya que además íbamos grabando de manera casi cronológica», ha contado la actriz.
Aquellos días de rodaje que se desarrollaron mayoritariamente casi en un único espacio, la mansión, hicieron sentir a la protagonista «como si no hubiera salido del teatro». De la grabación Campanela también destaca la facilidad de trabajar con Margarida Gil, «una directora muy humana» que les dio tanto a ella como a sus compañeros y compañeras de reparto «mucha libertad a la hora de interpretar».
Es por eso que, entre otros motivos, valora de manera muy positiva la experiencia para la gran pantalla donde, anteriormente, había tenido dos papeles secundarios. «Es mi primer papel como protagonista y estoy muy contenta porque no es lo mismo hacer una pequeña participación que estar durante todo un rodaje», ha señalado Campanela, quien ha compartido haberse quedado fascinada con la labor de Gil y del director de fotografía durante la grabación. «Yo pensaba que estaba todo decidido, pero no. Ellos exploraron una manera de filmar con la luz. Fue una experimentación como parte del proceso de trabajo y la verdad es que me quedé muy sorprendida».
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